Su transformación

He creado un programa de apoyo que reúne todas las etapas por las que pasa el ser humano o el alma, que viaja para alcanzar su transformación y evolución.

¿De qué se trata? Este programa se llama :

Desprogramación: el camino hacia ti mismo.

Este programa es el fruto, el zumo de todas las etapas por las que he pasado y que descubrí buscando mi propia verdad, a través de multitud de experiencias físicas, psicológicas, emocionales y personales.

Hoy vivimos tiempos sin precedentes, en los que una crisis se sucede a otra (pandemia, calentamiento global, guerra, inflación, crisis económica, etc.) afectándonos a todos en mayor o menor medida.

El silencio ante esta situación ya no es bienvenido. Como esto afecta a nuestros pensamientos, a nuestro estado de ánimo y a nuestra salud mental, acaba contagiándose y expresándose en nuestra salud física, emocional y psicológica.

Por eso he dedicado los últimos años a estudiar y comprender el fenómeno por el que pasamos y a compararlo con otros fenómenos naturales o metafísicos. 

La situación actual está poniendo a prueba nuestra capacidad de adaptación y generando su cuota de estrés. 

Proporcionarle las mejores herramientas y la comprensión del proceso por el que pasan los organismos vivos para :

  • de la sombra a la luz; 
  • de la ignorancia a la conciencia;
  • desde el nacimiento y el renacimiento hasta la liberación y la reunión con su ser supremo.

He aquí un vistazo a todo el proceso. 

Para mí, la alquimia es el rompecabezas de la vida, el proceso natural de transformación.

La mayoría de la gente piensa en la alquimia como la transmutación de metales básicos, como el plomo, en oro. Esto no es erróneo en sí mismo, sólo que para aprender de ella necesitamos entenderla metafóricamente.

Para el verdadero alquimista, el proceso es algo mucho más profundo. Y ahí es donde reside la magia y lo que separa al maestro del alumno.

Los alquimistas sabían que la búsqueda de la ciencia con espiritualidad era un camino hacia un conocimiento más profundo y el despertar espiritual, que conducía a la autorrealización. Así que trataron de transformar el "plomo" de una conciencia no desarrollada en "oro", un alma iluminada. 

Los alquimistas han descubierto que el proceso evolutivo de transformación se divide en siete etapas. 

Este proceso por el que pasamos todo el tiempo es natural. Y puedes reconocer estas etapas en tu propia vida. Sin embargo, cuando se deja en manos de la naturaleza, suele pasar mucho tiempo hasta que las cosas evolucionan de forma natural. 

Al aprovechar la conciencia, los alquimistas trabajan con fuerzas para hacer avanzar el proceso evolutivo hacia el despertar espiritual.

Así que me inspiré en sus pasos para crear este programa.

Fase 1. Calcinación: fuego purificador

El alquimista reduce la vida a cenizas. Para construir algo nuevo, primero hay que destruir lo viejo. 

Experimentamos el fuego de la calcinación, a menudo involuntariamente, cuando nuestro ego se quema o cuando acontecimientos vitales impactantes nos obligan a pensarlo dos veces. 

Es una experiencia cáustica, pero que nos pone cara a cara con las facetas de nosotros mismos que nos frenan, y pronto surge una conciencia consciente de nuestros verdaderos sentimientos. 

Una vida de vanidad, malos hábitos y orgullo se interpone entre nosotros y nuestra piedra filosofal. Quemamos lo que se ha calcificado, lo que nos permite empezar de nuevo.

En otras palabras, ante todo es la constatación de que algo va mal en nuestras vidas. Un exceso de acontecimientos, emociones y experiencias negativas que empiezan a ser demasiado para soportar. 

Debido a la falta de dominio y conocimiento de las leyes naturales que proporcionan equilibrio y armonía, los seres humanos por naturaleza tienen que vivir en equilibrio con sus 2 polos energéticos, yin y yang, positivo y negativo, miedo y amor. 

El hombre ha perdido el rumbo. Ha adoptado una forma de tratar y actuar consigo mismo, con los demás y con la vida que le rodea a través del miedo y la separación creados por la negación de sus sentimientos. 

Desarrolló un ego sobrevalorado, que le costó el desequilibrio mental y material y la pobreza. Esta última se alimentó y forjó durante la infancia sin que él lo supiera.

Pero la buena noticia es que este ego, que procede del miedo y la falta de amor (lo explico detalladamente durante el programa) causados por un exceso de incomprensión, ira y falta de expresión de las emociones, está destinado a desaparecer un día u otro, ya que este miedo es una ilusión de la mente.

Este miedo está construido por una suposición de pensamiento infundada la mayoría de las veces. Por ejemplo: voy a parar los pies a la otra persona, o a hacerle daño por miedo a que ocupe mi lugar, o voy a decir que sí en lugar de que no, por miedo a que mi amigo se enfade o a que me juzguen o ridiculicen....

Entonces este pensamiento o idea propuesta por el pensamiento tendrá vida, hasta convertirse en un personaje llamado Ego, el viejo yo, el yo ignorante. 

En resumen, todo esto para decirte que este ego es un personaje ilusorio y que un día caerá el velo. Ese día es el día de la realización y el comienzo de la primera etapa. En la que el hombre empezará a recordar que vale más que eso, que quiere vivir mejor, que el peso del malestar empieza a pesar demasiado o simplemente que él también merece ser feliz.

La felicidad basada en el ego es una felicidad temporal, sin fundamento ni madurez. Tarde o temprano se derrumba por sí misma cuando la carga se vuelve demasiado pesada para soportarla.

El primer paso del programa y de la transformación es tomar conciencia de todo esto y empiezan a arrojar luz sobre quién eres realmente. 

¿Quién es usted y de dónde viene? ¿Por qué está aquí? 

Como el alquimista que comienza su búsqueda para transformar el plomo en oro. Poniéndonos cara a cara con nuestras facetas ocultas que nos retienen en patrones dañinos, malos hábitos y lejos de una vida de alegría, salud y riqueza. 

Esta etapa te permite tomar conciencia de dónde proceden tu malestar, tu ira y tu tristeza.

Paso 2. Disolver Disolver: Remover la sartén

El alquimista disuelve las cenizas en agua para crear algo nuevo. Los efectos de la calcinación suelen ir seguidos de una montaña rusa de emociones, desde la desilusión reaccionaria hasta la resignación. Esta es la etapa de la entropía y el caos; la falta de claridad no es inusual. 

Sin ataduras en un océano turbulento, confiamos en las reacciones viscerales, que nos conectan con las agitaciones más profundas del subconsciente. Muchos adoptan las artes creativas -rituales, escritura, música, danza- para aceptar y expresar los sentimientos que afloran a la superficie. 

Aquí es muy importante el ritual que se utilice o se elija y se ponga en práctica.

El segundo paso es remover la sartén. 

El alquimista observa la sustancia mientras la agita y la remueve de vez en cuando.

Todos los residuos en el plomo y las toxinas subirán a la superficie. 

Empiezas a darte cuenta de que hay mucha basura y zarzas bloqueando el camino y el paso de la luz, traducido aquí por tus creencias limitantes y la falta de conocimiento, conciencia y comprensión, como un velo sobre tus ojos.

La segunda fase del programa es la segunda gran realización, que va acompañada de una inmensa alegría, porque comprendes que esta tristeza no es eterna y que En cambio, tienes derecho a la alegría eterna. 

Etapa 3. Separación: lo bueno y lo malo

El alquimista separa lo que se ha disuelto. 

Permitir que las emociones y las experiencias nos invadan es una buena oportunidad para una reflexión más profunda. 

Al igual que al cepillar la suciedad de un fósil, el proceso natural de separación se hace visible.

El tercer paso es limpiar la casa.

Toma conciencia de la existencia de toxinas causadas por el juicio y la culpa, entre lo que consideras correcto o incorrecto, bueno o malo, verdadero o falso...

Durante esta tercera fase del programa, te comprometes a iniciar el proceso de limpieza, purga u otro tipo de purificación. 

Por supuesto, algunas toxinas serán más difíciles de eliminar que otras, dependiendo de tu resistencia y del entorno en el que te encuentres.

Etapa 4. Conjunción: el punto de no retorno

El alquimista mezcla un cóctel. 

El hombre toma conciencia de lo que le impide alcanzar su alegría, que se materializa cuando la reacción química es correcta. Es lo que los alquimistas llaman el punto de no retorno. 

Porque toda cadena creada correctamente es eterna en la vida que se le da. 

Lo que llamamos "concienciación". Sin conciencia, las cadenas siguen siendo frágiles y susceptibles de romperse.

El cuarto paso es afrontar la verdad sobre nosotros mismos, tanto la buena como la mala.

Y hemos decidido qué merece la pena conservar. La conjunción, a mitad de nuestro viaje, es la fusión y reintegración de estos elementos en algo nuevo.

Todas las cosas buenas, recién limpiadas, se reconcilian entre sí en proporción armoniosa, encendiendo un renovado sentido de claridad y propósito. Esta nueva conciencia consciente, junto con un fuerte sentido de conexión y comunión, será esencial para el viaje que tenemos por delante.

Durante esta cuarta etapa del programa, durante esta fase de transformación, empiezas a crear nuevas conexiones y una sensación de renacimiento. 

Esta conexión te une a tu esencia y a tu alegría suprema. Y esta nueva energía te dará la motivación y la inspiración que necesitas para cambiar y vivir la vida que deseas.. ¡Y que crees que te mereces!

Etapa 5. Fermentación: muerte y renacimiento

El alquimista crea nueva vida. 

La putrefacción es la liberación de cualquier influencia restante del ego -nuestra conciencia recién despertada ayudará a informar la experiencia- mientras que la fermentación simboliza el nacimiento del nuevo Yo en desarrollo. 

Las impurezas persistentes en esta etapa son menos evidentes y necesitan más examen de conciencia para resolverse, pero el resultado es una visión más elevada de la perfección y una identidad fuerte y auténtica. Una nueva visión unificada comienza a echar raíces en este terreno fértil.

El quinto paso es aclarar tu visión y tu camino

La misma energía aportada en la etapa anterior neutralizará rápidamente los parásitos e influirá en los demás canales. 

Su poder eliminará las influencias que te impiden vivir bien y atraer lo que crees merecer en tu vida.

Durante esta quinta fase del programa, tus ideas se convertirán en más clara y precisa, más productivo, más feliz y lleno de amor. 

Y es el mismo proceso químico que tiene lugar en nuestro cuerpo cuando estamos enamorados. Entiendes que eres importante y que mereces ser tu prioridad.

Etapa 6. Destilación: perfeccionamiento por etapas

El alquimista utiliza el fuego sagrado para quemar todas las impurezas finales. 

Una vez que nos hemos liberado de los elementos indeseables, todo lo que queda es esencial y está listo para el intenso refinamiento y elevación del proceso de destilación. 

Del mismo modo que los alquimistas calentaban y enfriaban una solución una y otra vez para aumentar su pureza, la destilación garantiza que no quede ningún residuo del ego -o de nuestro antiguo yo egocéntrico-, dejándonos libres e independientes de pensamiento y espíritu al cruzar el umbral final.

La sexta etapa consiste en perfeccionar las etapas anteriores. Como pelar una cebolla. Capa por capa. 

Esta etapa estará representada por los altibajos, los cambios de humor, la resistencia que aún se manifestará en las experiencias (cuando las puertas aún no se abran o cuando el resultado deseado aún no se manifieste) expresadas durante las secuelas del inicio de este proceso. 

El hombre es impaciente por naturalezaPorque el alma es consciente de su naturaleza, sabe que tiene la capacidad de manifestar las cosas más rápidamente. Pero todavía no el ser encarnado cuya necesidad ineludible de hacer este proceso de transformación. 

Y es entonces cuando se despierta la curiosidad del hombre y se llena de sed por aprender y conocerse a sí mismo a través de las enseñanzas. Acaba con la separación y la ignorancia y comienza a saborear la belleza de la vida y de su ser en busca de su piedra filosofal. 

Pelando todas las capas de la cebolla sin que le piquen los ojos. Y aunque haya lágrimas, serán de alegría y nada más.

Esta sexta etapa del te permitirá encarnar tu mérito, convertirte en tu prioridad y comportarse en consecuencia. Se acabaron las dilaciones, las molestias y el ponerse en segundo lugar. Salvo en caso de emergencia, claro.

Etapa 7. Coagulación: un nuevo comienzo para la luz dorada

El alquimista descubre la luz de la conciencia evolucionada, la piedra filosofal.

Lo que los alquimistas llaman el Grial.

La etapa final de nuestra empresa, y la culminación de nuestros esfuerzos, es ver todo esto reunido en una forma final e iluminada: un vehículo permanente de conciencia elevada, que encarne las aspiraciones más elevadas del cuerpo y del alma. 

Es normal afrontar el viaje más de una vez antes de encontrarse cara a cara con la piedra filosofal, porque éste no es el final de nuestra transformación. Más bien, es otro comienzo, ya que empezamos el ciclo de nuevo en busca de una comunión cada vez más profunda con el universo conectado y con nosotros mismos.

La séptima etapa es la manifestación de tu nueva vida. 

Empieza tu nuevo comienzo. Adquieres confianza y te sientes cómodo con tus pasos.

El conocimiento y la conciencia adquiridos te dan la maestría perfecta para alcanzar tus objetivos y crear en armonía lo que has programado. O que da sentido a tu existencia. 

Bendices el miedo y la ignorancia. Puedes silenciar tu ego y avanzar con firmeza, alegría y equilibrio en tu camino.  

Esta fase final del programa le permite sentirse completamente a gusto con el proceso, consigo mismo y con su entorno. Te conviertes en el creador y co-creador en plena conciencia. 

Usted crea su propio ritmo y bailas en armonía con el ritmo de la vida, confiando, amando y dejando ir

¡Qué vida! 🤪

Esta es la nueva vida a la que vas a decir hola y empezar a florecer día a día y convertirte en lo mejor que puedes ser. 

Si tiene sentido para ti y te recuerda quién eres. Haz clic aquí para obtener más información sobre mi programa de coaching: el camino hacia ti mismo.

¿Alguna pregunta? Póngase en contacto conmigo para concertar una cita.

Durante una hora, tendrás la oportunidad de hacerme todas las preguntas que te impiden ver tu luz y conseguir tu "oro".

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